¡La derrota no debe desmovilizarnos, a profundizar la revolución bolivariana!
Por: Denny Ortuño
Derrota es derrota, no entiendo la posición de que “perdiendo ganamos”, esa argumentación nos lleva a desmovilizarnos. “Dentro de todo no nos fue tan mal y ganó Venezuela”. ¡Falso! Nos fue muy mal y quien pierde precisamente es el país, los trabajadores y los desposeídos de siempre, porque le estamos entregando las victorias obtenidas y nuestro proyecto político socialista a la reacción, a la burguesía y al imperio quien no pierde tiempo en avanzar posiciones para acrecentar sus ataques.
Perdimos y eso es grave, una derrota en momentos en que estamos construyendo un país distinto al del siglo pasado, donde el capital y los gobiernos títeres imponían una política de estrangulamiento económico, político y social coloca a los golpistas en posición de acrecentar sus agresiones en contra el proceso.
No me vengan con el cuento que la democracia salió fortalecida, después del 2 de diciembre, que el pueblo demostró madurez, y que la oposición golpista se encuentra en trance de aceptar la constitución de 1999 y al actual gobierno bolivariano.
¡Falso! La democracia se ha visto fortalecida desde el mismo momento que aprobamos la constitución del 99, el pueblo ha demostrado en reiteradas oportunidades su compromiso con este proceso y la oposición golpista no aceptará nada que no sea la salida de Chávez y el desmontaje de toda la estructura económica y social chavista, incluido el PSUV.
Esta derrota si no se asume como tal y aprendemos de ella, nos llevará a bajar la guardia frente al plan golpista –que no se ha desmontado- del imperio del norte y sus lacayos.
Ya estamos observando los efectos perniciosos de la derrota del 2 de diciembre: desde los sectores opositores nos quieren imponer la conciliación; desde nuestras filas los oportunistas comienzan a considerarla para lograr una “concertación de toda la sociedad dentro capitalismo”.
Estamos viendo como los ESCUALIDOS golpistas, la iglesia católica, los partidos golpistas, los medios privados, nos quieren imponer condiciones - como la del cura Palmar con su ridículo decálogo – y exigencias para que se tomen en cuenta sus aspiraciones de testaferros del capital; estamos viendo como los grupúsculos de izquierda que acompañaban el proceso, asumieron sin ninguna vergüenza, los argumentos de la derecha para no aprobar la reforma, porque “esa no era la formula para construir un estado socialista”, “porque los revolucionarios esperan las condiciones objetivas para la toma del poder”, “porque los sindicatos de trabajadores se sienten desatendidos y agredidos por el régimen de Chávez”. Todos esos argumentos sumaron votos al golpismo.
No me vengan con cuentos que fue mejor así, porque sino estaríamos sometidos por las guarimbas golpistas que se planificaron y montaron para el mismo 2 de diciembre, pero que gracias a nuestra derrota se desmontaron. No me vengan con cuentos que los golpistas abandonaron sus planes de sacar a Chávez y derrotar el proyecto bolivariano.
No creo en esos cuentos.
¿Que nos deja esta derrota?
a) Necesidad de formación teórica revolucionaria de los trabajadores.
b) Fomentar la organización revolucionaria y del pueblo.
c) Difusión de las ideas del movimiento revolucionario y para ello debemos crear una prensa bolivariana y transformar los medios televisivos en medios de difusión socialista.
d) No conciliar con la burguesía y sus testaferros y argumentar las razones que tenemos para ello.
e) Formar y promover lideres regionales revolucionarios.
f) Difundir de forma estructurada y masiva las consignas, principios e ideas rectoras de la revolución bolivariana.
g) Aumentar la participación del pueblo en la construcción de la nueva sociedad socialista.
No debemos descuidarnos en momentos de mayor confrontación con la oligarquía y el imperio.
Hay que profundizar la revolución socialista en Venezuela, no podemos hacer ninguna concesión porque esta significa derrota del movimiento revolucionario.
¡No a la conciliación con las burguesía y sus lacayos!
¡A formarnos dentro de la teoría revolucionaria!
¡Organicemos nuestro poder!
¡Patria, Socialismo o Muerte!
¡Venceremos!
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